lunes, 29 de octubre de 2012

IV Reto Tía Alía: Monadas

Como cada último lunes de cada mes, volvemos al reto que nos propone Carmen del blog Recetas de Tía Alía. Si el mes pasado, cuando participé por primera vez, estaba ilusionadísima e hice la receta con muchísimo cariño especialmente dedicada a Carmen, la autora del reto, este mes lo hago además de encantada con muchas ganas y expectación.


De sus dos propuestas, como era de esperar, he elegido la dulce, los asiduos de este blog ya conocéis mi tendencia sweet, además el nombre de la receta me cautivó desde el principio: Monadas!. ¿monadas?, con este nombre es imposible que no me gustara... Así que enseguida supe que yo participaría con esta propuesta. Sin embargo, tengo que reconocer que cuando realmente me puse en marcha para la creación de esta receta, en algún momento pensé en cambiarme a la salada, y ahora os cuento por qué.





Precisamente le contaba a Carmen hace un ratito por email, que en esta ocasión me enfrentaba a una receta que, aunque me encantaba, no conocía en absoluto: Las monadas no la he visto nunca, mucho menos probado y por si fuera poco, en internet no encontré nada de nada, así que iba totalmente a ciegas con este reto. A puntito estuve de preguntarle a ella todas mis dudas, que me dijera como las había preparado o me mandase alguna de sus fotos para guiarme un poco.



Pero al final me armé de valor y pensé que la gracia de este reto precisamente recae en eso, en las mil y una formas y versiones que salen de una misma receta. Y es por eso por lo que os decía al principio que participo en este reto con mucha expectación. Nos sabéis las ganas que tengo de empezar a ver cómo les han salido las monadas a mis compis retantes, no lo sabéis...




No tengo ni idea del aspecto que tendrán las monadas de mis amigas blogueras, pero las mías tienen aspecto de galleta, o más bien de torta. El sabor es sin duda lo mejor de ellas... me recuerda a mi infancia, a los postres de mi abuela, ese aroma a tiendecita de barrio con roscos de vino y azúcar en el mostrador... Ese toque de anís que me enamora.


Ingredientes:

200 gr. Harina de Trigo
100 gr. Azúcar
1 cucharadita de anís
1 cucharada de manteca fresca
2 huevos

Preparación:

La preparación es muy fácil y rápida. Ponemos en un recipiente la harina, el azúcar, el anís y mezclamos un poco los ingredientes. A continuación añadimos los huevos previamente batidos y la manteca fresca. Trabajamos la masa bastante hasta que quede fina.


Precalentamos el horno a 180º, y mientras tanto, en una bandeja, vamos disponiendo nuestras monadas. A mi me quedó una masa muy cremosa, por lo que tuve que utilizar una manga pastelera.

Vamos poniendo en una placa de horno montoncitos de masa, separados los unos de otros porque luego se extienden bastante. Horneamos durante 20 minutos aproximadamente (o hasta que veas que están doraditas).


Dejamos enfriar en una rejilla y ya están listas para comer!!. El resultado es una torta tierna y esponjosa por dentro, crujiente por fuera, con un sabor delicioso a anisete y una textura ideal para
mojar en leche. Las monadas van a ser parte de mis meriendas muchas veces, lo sé.





Carmen, gracias una vez más por enseñarme las delicatessen del recetario de Tía Alía, estas pequeñas jollitas que compartes con todas nosotras no tienen precio!

Muaaaaakkkk

Feliz Lunes!!

domingo, 21 de octubre de 2012

Mi obra más dulce II

Mi vida, hoy cumples dos añitos y es inevitable amanecer recordando el momento en el que vi tu carita por primera vez, fue una noche dura, pero no hay dolor que no borre esa mirada tuya. Pero eres tan chiquita aún, que no puedo dejar de pensar todo lo que te queda por descubrir... hay atardeceres, hay mares, océanos, hay espacios, lugares, hay rincones... hay un universo de pequeñas cosas y yo quiero enseñarte a descubrirlas todas!!!.

A dar los primeros pasos en el camino, enseñarte a pronunciar tu discurso de vida, no importa cuan independiente serás, porque yo siempre permaneceré a tu lado, para eso vivo, en nada más pienso.

Y a pesar de enseñarte a caminar por el camino, quizás nunca sepas, mi querida hija, que realmente eres tú quien me enseña a dar grandes pasos en la vida. Eres mi libro, eres mi aula... eres mi lección de vida.

Te quiero tanto...


Feliz cumpleaños princesa!! que este día y todos los que vengan estén llenos de felicidad para ti. Para eso vivo, por eso muero.

Te quiero mi amor

-----------------------------------------------------------------------------------

Queridos amigos,

Tenéis que perdonarme una vez más, hoy no hay receta!, igual que hice el año pasado aquí, hoy no podía más que dedicarle el post a mi pequeña África por su segundo cumpleaños y dirigirme directamente a ella. Veis cómo ha crecido??... nunca podía haberme imaginado tanto amor por un ser tan chiquito, ocupa todos mis pensamientos, todas mis horas y de todos mis días.

martes, 16 de octubre de 2012

Tarta Rápida de Chocolate y AIG 2012

Tenía pendiente publicar esta receta mucho antes, aún así me he retrasado un poquito, justo un mes, me acuerdo perfectamente de la fecha porque hoy hace un mes que nació mi sobrino Juan. Y como el motivo de hacer esta tarta fue precisamente dado por su nacimiento, hoy quería publicarla para celebrar su primer mesversario.


El pequeño Juan se adelantó sin previo aviso,  así que no tuve la oportunidad de hacer una tarta con diseño premeditado y encima tenía a cargo a su hermanito Tomás de dos años, que fue realmente el que me impulsó a hacerla a lo rápido. Mi sobrino Tomás es junto con África las pupilas de mis ojos, así que no hay nada que no me pidan estos dos mocos que yo no haga.



 
Pero claro, era domingo, no había ninguna tienda abierta para comprar ingredientes y además había estado toooooda la noche en el hospital esperando que mi hermana diera a luz al pequeño. Para cuando llegué a casa el cansancio se empezaba a notar y aún tenía a dos diablillos con los que lidiar.


Miré en mi despensa: nata, chocolate y nutella... bueno... no iba a ser una tarta de alto standign, pero tenía lo suficiente para hacer una tarta de "mamá me quiere, mi tita es la caña". Así que no tuve más remedio que hacer una tarta algo más modesta a lo que los tengo acostumbrados, pero que a mis peques les gustó como si realmente hubiese estado toda la noche modelando.


Además luego me alegré mucho de haber encontrado esta receta, porque el bizcocho es uno de los más sanos que he probado nunca. Fijaos en sus ingredientes, apenas tiene grasas y si luego lo vais a cubrir de un frosting dulcecito de nutella, como hice yo, incluso podréis rebajar un poco la cantidad de azúcar del bizcocho... Vamos, que esta receta cumple todos los requisitos para ser repetida una y mil veces: fácil, barato, rápido y delicioso! y lo mejor es su textura, ya que es un bizcocho húmedo, genial para que los más pequeños lo degusten sin ser atragantados y como base para una tarta sin tener que calarlo.


 

Ahí os dejo la receta, que ya tendréis ganas de probarlo!!!

Ingredientes:

200 gr. de harina
250 gr. de azúcar
75 gr. de cacao puro en polvo
450 ml de leche
40 ml de aceite de girasol
1 sobre de levadura química
una pizca de sal

Para el frosting:

Nata vegetal
Nutella
Springles tres chocolates

Preparación:

Precalentamos el horno a 180º, y mientras toma temperatura, tamizamos todos los ingredientes secos en un bowl, esto es, la harina, azúcar, cacao, levadura y sal y reservamos. En otro bowl, ponemos el aceite junto con la leche y vertimos esta mezcla a los ingredientes secos.


Mezclamos muy bien ambas partes con unas varillas, pueden ser manuales o eléctricas, y ponemos esta crema en un molde para horno que previamente habremos engrasado para que no se pegue.

Horneamos unos 35 minutos aproximadamente, cerciorándonos de que el bizcocho está totalmente hecho pinchándolo con un palito de brocheta en su centro y comprobando que éste sale limpio.

Mientras se templa, preparamos nuestro frosting, yo lo hice muy rápidamente montando nata vegetal y añadiendole unas 4 o 5 cucharadas soperas de nutela. Pero también podeis rellenarlo de chocolate, nata, trufa... es un bizcocho muy versátil que admite un sin fin de rellenos.


Espero que lo hagais algún día... con esta receta la excusa del "no tengo tiempo" no me vale!!

Y ahora vamos al AIG, que por fin puedo participar!!!. El año pasado me quedé a las puertas porque mi blog era aún un bebé y no cumplía el requisito del tiempo. Pero este año si que si, y además no me lo pierdo porque me hace una ilusión que no te imaginas. Como otros años, lo organiza Joana, de mis recetas bordadas, y este logo tan chulo lo ha hecho France, la mamá de Palmira del blog Come conmigo.

Para ayudar a mi AIG tengo que escribir sobre las cosas que me gustan... y conmigo lo tendrás muy fácil, porque me gusta de todo (tanto lo que conozco como lo que desconozco, de manera que si me mandas un libro de ¿bricolage? en lugar de repostería, ten por seguro que esa misma semana pongo en mi casa un taller y monto una estantería). Ahora en serio, lo que si valoro muchísimo el intentés que le pongas al regalo, y seguro, lo que más ilusión me haga sea esa parte handmade del "hecho por ti mismo". Soy muy entusiasta y cualquier cosa que me envíes será bien recibido, con el mismo cariño o más con el que estoy segura que pusiste al enviarlo. No siento la necesidad de perdirte nada en concreto porque sé que envíes lo que envíes me contentará, pero si aún con esas te sientes un poco perdido y quieres saber más sobre mí puedes visitar la pestaña que encontrarás más arriba donde describo un poco mi vida, mi día a día y mi amor por mi hija, mi marido y mi profesión como publicista.


Feliz semana a todos!!!

Besototeeesssss

lunes, 8 de octubre de 2012

Tortas Locas de Málaga

Desde que era una niña interioricé en mí la idea de no pasar mucho tiempo en la misma ciudad... el trabajo de mi padre no lo permitía, y cada cierto tiempo o cada vez que había un ascenso de galones, toda la familia era trasladada a un nuevo destino.

Eso de no poder echar raíces en ningún suelo puede ser un trauma o puede ser lo mejor que te ocurra en la vida. En mi caso, yo estoy muy contenta porque conoces a mucha gente, te empapas de muchas tradiciones y de muchas culturas, y al final en todos sitios, entre unos y otros, te hacen sentir como en casa... pero a pesar de todo esto, de los amigos y de las vivencias que dejas en cada sitio, al final la tierra te llama, y en casa siempre sabíamos que nuestro destino final era Málaga.

Yo siempre he querido mucho cada lugar donde he vivido, lo he sentido muy mío en corazón y en alma, como si fuera mi casa, pero también siempre he llevado por bandera y no he escondido mis raíces más tempranas, y yo nací en Málaga.


Por eso me siento orgullosa de ser malagueña y por eso también me siento muy feliz de poder mostraros la fabulosa gastronomía que tiene mi tierra. Y ¿sabes qué?, que gracias a esta receta se ha despertado dentro de mi un interés por la cocina tradicional de aquí, por eso, tengo como propósito el publicar al menos una receta al mes de comida típica malagueña (en la que espero tener un poquito de ayuda externa ;)


De momento surge como boceto la pestaña que veis más arriba y con ella una nueva sección en el blog que he querido llamar "Con Denominación de Origen", ahí podréis ver las recetas de comida malagueña mas típicas y tradicionales. Espero que os guste mucho, que llevéis alguna a la práctica y, sobre todo, que os sorprenda y si hay por ahí algún boqueroncito que quiera aportar su granito de arena, siempre será bienvenido.


Ahora os dejo con la receta de este famoso dulce malagueño, se llama "Torta Loca" y no encontrarás ninguna confitería de Málaga donde no lo tengan. Pero, a pesar de su fama, apenas he encontrado recetas en Internet, tal vez porque lo que realmente es típico de aquí es comerlo directamente en la terraza de una buena pastelería, así que mirando y mirando, preguntando e investigando, he dado con la receta que nada tiene que envidiar a las autenticas Locas de Tejero. Queda deliciosa, crujiente, dulce... y el glaseado de yema es una auténtica delicia, de verdad os digo que si se llama Loca es porque realmente enloquece.


Ingredientes:

1 Plancha de Masa de Hojaldre
Guindas rojas en almíbar

Para la crema pastelera:
la piel de un limón (sólo la parte amarilla)
1/2 Litro de leche
150 gr. de azúcar
3 yemas de huevo
50 gr. de maicena

Para el glaseado de yema:
200 ml de agua (para almíbar)
200 ml de azúcar (para almíbar)
4 yemas
135 gr. de azúcar
50 gr. de maicena
Colorante alimenticio naranja (no es necesario)

Para el glaseado final:
125 ml de agua
250 gr. de azúcar

Preparación:

Cortamos el hojaldre en círculos intentando aprovechar al máximo toda la plancha (yo utilicé hojaldre refrigerado - es importante no manipularlo con el rodillo para que quede bien hojaldrado). Precalentamos el horno a 220º y vamos poniendo en una placa de horno los círculos de masa, colocamos encima una lámina de papel sulfurizado y otra placa de horno para que actúe como contrapeso y nuestros discos queden bien hojaldrados pero no subidos en exceso. Tardarán en hacerse aproximadamente 15 minutos.


Mientras tanto vamos preparando nuestra crema pastelera. Para ello batimos las yemas de huevo y el azúcar hasta que quede todo bien integrado. Añadimos la maicena disuelta previamente en 1/2 taza de leche (retirada de los 500 ml. totales) y reservamos. Hervimos el resto de la leche y cuando rompa la ebullición, añadimos mezcla de yemas, azúcar y maicena. Bajamos el fuego y dejamos cocer hasta que espese. Colocamos en una manga pastelera y reservamos.


Mientras se entibia nuestra crema pastelera, preparamos el riquiiiiiiiisimo glaseado de yema, esta parte es realmente la que le da el toque mas chic a nuestra Torta Loca y es muy fácil de preparar. Hacemos un almíbar con los 200 ml de agua y los 200 gr. de azúcar. Mientras se templa un poco, mezclamos en otro recipiente las yemas con el azúcar y la maicena y batimos hasta que se forme una cremita fina. Si utilizas unas buenas yemas de huevo de granja que son muy anaranjadas no te hará falta utilizar colorante alimenticio, pero si no, este es el momento de añadirlo. Una vez la tenemos lista la añadimos al almíbar removiendo rápidamente para que no se cuaje. Ponemos la mezcla al fuego y, removiendo lentamente para que no se pegue hasta que tome cuerpo y quede un poco espesa.


Ya podemos montar nuestras Locas por capas. Primero ponemos una base de hojaldre, encima un poco de crema pastelera y cerramos con otra base de hojaldre. Presionamos un poco para que la crema se asiente y ocupe todo el circulo. A continuación ponemos la cobertura de glaseado de yema. Es importante no poner esta crema hasta el borde, porque luego se expandirá ella misma hasta que se cuaje un poco, así que lo ideal es echar una cucharadita en el centro y dejar que se asiente por si sola. Dejamos reposar unos minutos y colocamos un trocito de guinda roja para decorar.


Ya sólo queda darle el toque final de glaseado que hace la función de endurecer el de yema. Es muy fácil de hacer, tan sólo calentamos el agua y el azúcar en un cazo y cuando esté todo bien disuelto bañamos la parte superior de la torta.



Espero que os guste este dulce mañagueño, de verdad que me siento muy orgullosa poder enseñaros esta receta y me haría muchiiiiiiiisima ilusión ver que alguien se anima a hacerla, y para convenceros de ello, os enseño a esta carita hermosa que le vuelven loca las Tortas Locas!



Feliz lunes!!!

P.D: Poquito a poco voy intentando compleatar el blog, y ahora le toca el turno a las redes sociales, ya podéis ver arriba a la derecha los enlaces directos para encontrarme en Facebook, Pinterest o Twitter.También en Instagram como @mamaindesign, espero veros a todos por allí!


Besoteeessss ♥